Washington – Capitolio
Esta semana os copio un interesante artículo leído en El País Semanal en el que se dan bastantes datos sorprendentes y algunos directamente apabullantes, sobre la capital de los Estados Unidos. Seguro que os gusta.
Esta semana os copio un interesante artículo leído en El País Semanal en el que se dan bastantes datos sorprendentes y algunos directamente apabullantes, sobre la capital de los Estados Unidos. Seguro que os gusta.
Oklahoma City al atardecer. La ciudad que muestra la estampa típica del medio oeste americano; extensa y sin grandes edificios, parece que se apunta a la moda de los rascacielos. El que aparece en el centro de la fotografía es el más alto de la ciudad. Prometen que construirán más y más altos. Conociéndolos, seguro que lo consiguen.
El edificio Flatiron es uno de los rascacielos más emblemáticos de la ciudad de Nueva York. Situado en la confluencia de la Quinta Avenida y Broadway, su forma, parecida a la de una plancha, hizo que rápidamente perdiera su nombre oficial para ser llamado de esta forma: flatiron.
Su diseño obedece a los cánones fijados en la Escuela de Chicago, y su aspecto, visto desde la terraza de observación del Empire State, parece la de un hermoso barco de piedra que permanece varado en medio de la calle, mostrándonos su afilada quilla, como si estuviera a punto de iniciar un viaje a un lugar remoto y desconocido.
El lago Michigan es uno de los cinco grandes lagos de Norteamerica y el único que se encuentra totalmente dentro del territorio de Estados Unidos. Sus aguas bañan cuatro estados: Indiana, Illinois, Wisconsin y Míchigan. Visto desde la ciudad de Chicago parece, más que un lago, un inmenso mar, un océano inabarcable, tránquilo y hermoso.
La fotografía está tomada al amanecer desde la zona de Navy Pier.
Vértigo. Esa es la sensación que sientes cuando te sitúas sobre el cristal del mirador de la Torre Willis en Chicago. Este edificio que tiene 412 metros de altura y 103 plantas, ofrece las mejores vistas de la ciudad, por lo que subir hasta su mirador es obligación ineludible. Aunque son miles los que caen en la tentación cada día, no son tantos los que terminan pecando. Mientras esperas impacientemente tu turno, los ves avanzar y retroceder en un quiero y no puedo. Observas cómo cogen aire, cierran los ojos, se concentran, aprietan los puños y… se dan la vuelta. Yo, en ésta ocasión, si cumplí con el ritual. Que se enteren los que me pusieron en la cartilla de reclutamiento: “valor: se le supone”.
Red Rock Canyon National Conservation Area. Las Vegas. Nevada. Estados Unidos.
Y para terminar una fantástica canción de Tom Waits: “Soldier’s things”Mi abuelo materno vivió tiempos difíciles. Durante el servicio militar lo enviaron a la guerra de Africa. Tuvo suerte y volvió sin un rasguño. Yo, siendo niño, le preguntaba fascinado por sus experiencias en el frente y él solía evitar la conversación. Los recuerdos no le traían gestas heroicas a la memoria, sino más bien todo lo contrario: tristeza y vergüenza. Una tarde le hice la pregunta más difícil. Abuelo, ¿tu mataste a alguien en la guerra? El contestó: no lo sé, yo estaba en artillería y seguramente alguno de los cañonazos daría a alguien, pero nosotros no lo veíamos. Quién sabe. Espero que no…
El puente que une los distritos de Manhattan y Brooklyn tiene merecida fama de ser uno de los más bonitos del mundo. Es imprescindible cruzarlo para hacer la foto más característica de la ciudad de Nueva York; la que muestra su skyline o “linea del cielo” enmarcando los edificios más representativos. Esta imagen inolvidable se toma desde el barrio de Brooklyn, justo al otro lado del puente. Así que mejor no quedarse en el lugar que muestra la foto y continuar hasta el final. Queda avisado: el recuerdo será imperecedero.
Río Mississippi. Sant Louis. Estados Unidos.
Lo más cerca que estuvimos de un bandido durante nuestro viaje a través de la Route 66, fue cuando visitamos las cuevas Meramec. Distintos testimonios dan fe de que fueron utilizadas en numerosas ocasiones, como guarida y escondite, por Jesse James y su banda. La configuración de la cueva, situada en un lugar apartado, lejos de los caminos más transitados, y lo intrincado de su interior, facilitaban su uso por pistoleros de toda índole. Aunque el más famoso de todos ellos fue Jesse James.