Cuenta Eusebio Leal, el historiador de la ciudad y responsable de la restauración y rehabilitación de su centro histórico, que La Habana es “un estado de ánimo”. “Cuando uno llega a La Habana, siente que algo le seduce, le atrae, le atrapa, no deja indiferente a nadie. A veces la ciudad está cubierta por un velo de decadencia. Pero cuando tú rompes el velo aparece el esplendor de su urbanismo y de una arquitectura que te permite, por una sola avenida, ir desde los castillos del siglo XVI hasta la modernidad de Richard Neutra”. El País.
Debajo tenéis el enlace al artículo completo, por si tenéis curiosidad por conocer más detalles de esta hermosa ciudad.
https://elpais.com/cultura/2018/12/29/actualidad/1546098285_186364.html