Tras años difíciles para el sector turístico debido a la inseguridad que atenazaba al país, Egipto vuelve poco a poco a la normalidad. Este año se ha incrementado notablemente el número de españoles que, aprovechando la programación de vuelos charter directos, una opción que facilita y abarata los viajes, se apuntan a los circuitos clásicos que tanto éxito tuvieron en el pasado. Entre los más demandados están los que incluyen un crucero de cuatro o siete días por el río Nilo y una estancia en El Cairo, con la imprescindible visita a las pirámides.
En la imagen se pueden ver a camelleros esperando a turistas para ofrecerles un paseo por la llanura de Gizá. Imprescindible el regateo hasta conseguir un precio razonable.
