No falla. Cada vez que ves una lista con los pueblos más bonitos de España, Albarracín está incluido en los primeros lugares. Estas son las razones: la localidad fue nombrada Monumento Nacional en el año 1961, posee la Medalla de Oro al mérito en las Bellas Artes en 1966 y está propuesta por la Unesco para ser declarada Patrimonio de la Humanidad por la importancia de su patrimonio histórico.
Un paseo por sus calles y, a ser posible, acompañados de una buena guía que nos explique de forma amena y didáctica sus características, es una obligación ineludible en cualquier visita que tenga como destino la provincia de Teruel, una provincia que como bien dice el clamor popular “también existe”.