Río Mississippi
Río Mississippi. Sant Louis. Estados Unidos.
Río Mississippi. Sant Louis. Estados Unidos.
Esto del autorretrato ha existido siempre, pero en la actualidad y tras popularizarse la expresión anglosajona “selfie”, se está convirtiendo en una pandemia. Te llegan al correo electrónico, teléfono, redes sociales…, vamos, un tormento. Habrá que tomarlo con resignación pues no parece que la cosa vaya a ir a menos. Yo, por sí acaso, me he agenciado una estampa tamaño XXL del santo Job. Veremos si funciona…
Lo más cerca que estuvimos de un bandido durante nuestro viaje a través de la Route 66, fue cuando visitamos las cuevas Meramec. Distintos testimonios dan fe de que fueron utilizadas en numerosas ocasiones, como guarida y escondite, por Jesse James y su banda. La configuración de la cueva, situada en un lugar apartado, lejos de los caminos más transitados, y lo intrincado de su interior, facilitaban su uso por pistoleros de toda índole. Aunque el más famoso de todos ellos fue Jesse James.
El singular y preciosísimo pueblecito de Flam en Noruega. Como se puede ver en la imagen, un lugar en el que hombre y naturaleza conviven de forma armoniosa. Este es un reto al que el país hace frente cada día: crecer económicamente para mejorar las condiciones de vida de sus ciudadanos, sin que ello suponga destruir su entorno natural. Viajando por sus carreteras y fiordos, llegas a la conclusión de que parece que lo están consiguiendo. Este compromiso asumido por toda la población hace que, probablemente, Noruega sea el país más respetuoso con el medio ambiente del mundo.
A la mayoría les parecerá inaceptable la construcción de un campo de fútbol en plena playa y siendo sinceros, seguro que tienen razón. Pero no creo que haya un sólo aficionado a éste deporte que rechazara la posibilidad de “echar un partidillo” en un lugar tan hermoso. Si además marcas un gol, ni te cuento…
La fotografía está tomada desde uno de los miradores del barrio de Miraflores, en la ciudad peruana de Lima. Reconoceréis conmigo que el lugar merece, sin ningún género de dudas, el calificativo de “singular”.
Plaza de Santa María, el corazón de la ciudad medieval de Cáceres.
Si existen trabajos penosos en el mundo, el de curtidor en la ciudad de Fez, Marruecos, debe ser uno de ellos.
La tarea de estos operarios comienza sumergiendo las pieles en una tinas circulares de ladrillo llenas de cal y excrementos de paloma (describir el olor hediondo que desprenden se antoja tarea imposible). Durante este proceso, la piel debe quedar limpia de restos de pelo y carne, cosa que a veces no se consigue, por lo que tras su “estancia” en estos recipientes, el curtidor extrae las pieles y las repasa y limpia a mano, pues éstas deben quedar impolutas, listas para la segunda fase, la del tintado.
En esta segunda fase, las pieles adquieren su color definitivo tras entrar y salir numerosas veces de las tinas, movidas siempre a mano por el curtidor que mediante este proceso, consigue que el tinte impregne de forma intensa y uniforme toda la superficie de la piel. Todos los colores del arco iris tienen su reflejo en estos contenedores, aunque la moda imperante en cada momento, hace que predominen uno u otro de forma totalmente caprichosa.
¿Se puede comer dentro de una gramola? Por extraño que parezca, si es posible. Sólo tienes que parar tu vehículo en el parking del Peggy Sue´s restaurante y entrar. Iniciarás un sorprendente viaje al pasado reciente.
Acostado junto a las montañas de Calico, en California, este peculiar “diner” mantiene intacto el ambiente de carretera de los años cincuenta. Todos los iconos populares de esa época, desde Elvis Presley hasta Popeye, encuentran acomodo en su decoración. Los menús están en consonancia con la imagen que ofrece el establecimiento: platos típicamente americanos, con abundancia de comida rápida y raciones a rebosar. Desde el primer momento se ve que las exquisiteces culinarias no son su fuerte. Además hay que echarle un poco de paciencia, pues el servicio es algo lento. Pero la espera merece la pena. Lo dicho. No todos los días se tiene la posibilidad de comer dentro de una ¡gramola!
Cayo Zapatilla es una pequeña isla que pertenece al archipiélago caribeño de Bocas del Toro en Panamá y lugar de visita obligada para los turistas que se alojan en la ciudad. La excursión de día completo se contrata con touroperadores locales a precios bastantes asequibles. Suele incluir el viaje en lancha, actividades de buceo en zonas de coral, avistamiento de delfines (se necesita un poco de suerte), observación de “osos perezosos” (por qué se llaman de esa manera es un misterio ya que en realidad son monos) y un almuerzo ligero. En todo momento se va acompañado de un guía que dirige y supervisa las maniobras, por lo que la sensación de seguridad es absoluta.